sábado, 20 de diciembre de 2025

Las Tres Navidades

 Las Tres Navidades

Diciembre tiene esa magia rara: el aire cambia, las luces aparecen, los abrazos se vuelven “obligatorios” y la nostalgia se cuela como si también tuviera derecho a sentarse a la mesa. Para muchas personas, es la época más bonita del año: reuniones, risas, comida compartida, recuerdos que se vuelven ritual. Para otras, en cambio, es una temporada difícil: extrañan a alguien que ya no está, se sienten más solos, están cansados, preocupados por el dinero o simplemente no logran “sentirse felices” como se supone que deberían.


Hay razones humanas y también biológicas detrás de ese bajón que a veces aparece a finales de año. De hecho, existe algo llamado trastorno afectivo estacional (SAD, por sus siglas en inglés): síntomas depresivos que suelen iniciar en otoño o invierno y mejorar en primavera, relacionados con la reducción de luz solar. 


Ahora, súmale a eso la presión social, las dinámicas familiares, la comparación, el cierre del año, las metas no cumplidas y el “deber ser”… y tienes una mezcla emocional potente. Por eso, más que hablar de una Navidad, a mí me gusta pensar que tenemos tres opciopnes para vivir la Navidad. Y reconocerlas puede cambiar por completo tu manera de atravesar estas fechas.


Navidad social: la que nos venden.

Esta es la Navidad que se anuncia con jingles, descuentos, listas de regalos y la promesa implícita de que si compras lo suficiente, entonces vas a sentirte bien. Es la Navidad donde el amor se mide en envolturas, donde la alegría se confunde con consumo y donde el “éxito” de la noche se evalúa por la foto expuesta en la redes socuales: mesa perfecta, familia perfecta, momento perfecto. Ojo: no se trata de demonizar los regalos ni las fiestas. Regalar es un acto hermoso cuando nace del corazon y se ejerce de forma desinterasada, y  celebrar es una parte importantisima de nuestra naturalez social que impacta en directamente en nuestra salud mental y emocional. Además, diciembre es clave para la economía: hay empleos temporales, movimiento comercial, negocios que se sostienen gracias a esta temporada. La vida real necesita dinero, y eso no es un pecado.


El problema aparece cuando la Navidad social se vuelve una especie de examen emocional y financiero “Si no regalo, no valgo”,”si no voy, soy  estoy ma”l o “si no estoy feliz, algo está mal conmigo.”Y esa presión no es inventada. En una encuesta difundida por NAMI (National Alliance on Mental Illness), muchas personas reportaron que las fiestas les aportan tristeza o insatisfacción, estrés financiero, soledad, presión y expectativas irreales. 


La Navidad social puede ser bonita… pero también puede ser ruidosa, exigente y, a veces, superficial. Una celebración que se vive hacia afuera, como si el objetivo fuera convencer al mundo (y a uno mismo) de que todo está bien.


 Navidad simbólica (El que quiera ver que vea)

Esta Navidad es más antigua que los anuncios. Es la Navidad de los símbolos, de las historias que nos enseñan algo sobre la vida, el tiempo y la esperanza. Aquí caben distintas tradiciones: la cristiana (el nacimiento de Jesús), las lecturas espirituales, el sentido de los ciclos, el reconocimiento de que el año muere y renace. Por ejemplo, alrededor del 21 de diciembre ocurre el solsticio de invierno en el hemisferio norte: la noche más larga, el día más corto. A partir de ahí, poco a poco, la luz regresa. Este hecho natural se volvió, para muchas culturas, una metáfora poderosa: cuando todo parece oscuridad, la luz no desaparece; se está preparando para volver.


En la tradición cristiana, la Navidad celebra el nacimiento de Jesús —un símbolo de renovación, de amor encarnado, de esperanza para los que sienten que no hay esperanza—. Y más allá de la religión específica, el mensaje simbólico es claro: la luz nace en tiempos difíciles. No cuando todo está resuelto, sino cuando el mundo parece más frío. La Navidad simbólica nos recuerda las grandes virtudes del ser humano: Amor, Gratitud, Compasión, Reconciliación, Perdón, Generosidad, Humildad, Servicio entre otras Y aquí viene una idea que me encanta: los símbolos no son cuentos para niños; es el recordatorio para la mente que esta preparada y abierta para evolucionar. 

 

Navidad interior: la que nadie puede darte (ni quitarte)

Esta es, para mí, la más importante. La Navidad interior es cuando dejas de buscar que la fecha te “salve” y empiezas a preguntarte: ¿qué necesito yo para renacer por dentro? puedes tener una cena espectacular y sentir un vacío enorme. Y también puedes estar en una temporada difícil, con un duelo o con incertidumbre, y aun así encontrar un espacio pequeño de paz dentro de ti.

La Navidad interior no depende de  cuántos regalos diste o cuantos recibiste, no depende de la cantidad de  posadas a las que te  invitaron o si  el año salió según lo planeado.


La Navidad interior representa en un primer momento el reconocimiento de la oscuridad que habita en nuestro interior, es identificar aquellas pasiones, apegos,  deseos y vicios que nos dejan empantanados en las tinieblas y que nos impide evolucionar en conciencia.  Al reconocer esto, por ende viene  el  redescubrimiento de la Luz Divina que alumbra  desde nuestra alma, y entonces se reconoce el nacimiento del Cristo interior en medio de nuestra oscuridad. Trasmutado en Amor, Esperanza y Fe. 

 

Entonces… ¿Qué Navidad quieres vivir?


¡Vive las Tres!, pero no te confundas recuerda que  la primera es del “mundo”, la segunda del “universo” y la tercera es  “tuya”.

 


Con afecto 

 

Servir para Trascender

Miguel Vladimir Rodriguez Aguirre

 

14 comentarios:

  1. Touchè..muy certeras líneas Vlady, a disfrutar el momento.

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  2. Gracias por compartir Vladimir, saludos

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  3. Gracias estimado amigo Vladimir por compartir extraordinario mensaje. Te envío un fuerte abrazo

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    1. Un gusto mi estimado Amigo. Te envío un fuerte abrazo.

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  4. Gracias por compartir tan nobles y bellas palabras. "De la Abundancia del Corazón habla la boca". Bendiciones!

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    1. Un gusto. Bendiciones para ti y los tuyos…

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  5. La pregunta sería Mtro. Vladimir, ¿Cómo alcanzar la Navidad interior?, cundo hay una decisión familiar que dice en tal lugar la pasamos sin haber un acuerdo previo o condensado , y en donde a veces se da el chantaje sentimental, por llamarlo así. Y excelente lectura.
    Lo mejor para todos los suyos maestro en estas fiestas decembrinas.

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    1. Decía el Maestro “la Navidad interior solo llegará cuando halla Paz y claridad dentro de ti. Por lo tanto busca primero La Paz contigo y entonces podrás buscar La Paz en y con los demás”

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  6. Acertado , creo que los años nos hacen ir distinguir cada una de ellas, poder disfrutarlas las tres qué nombras, es señal de qué llegas a cierta madurez, saludos

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    1. Totalmente de acuerdo. Saludos y Bendiciones…

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  7. Es el tiempo propicio de reconocer al Señor Jesucristo como único salvador y mediador entre Dios y la humanidad, y reconocer también que estamos de paso en esta vida, así que gracias a Dios por su hijo que nos da la paz y la alegría para apreciar cada momento, Feliz Navidad 🎄

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    1. ¡Feliz Navidad! Saludos y Bendiciones…

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